Hombres de gris.

Era lo único que quedaba: el paraguas amarillo, las botas rojas y el abrigo azul. 

En medio del paisaje sombrío de otoño, con frío invernal, sin calor natural. 

Momo y los ladrones del tiempo. Hombres vestidos de gris, fumando un humo gris, dejando tras de sí un paisaje gris. 

En medio del paisaje, una flor. Flor roja, flor débil, flor pequeña. Flor que intenta tocar otras flores, pero no alcanza. No tiene manos ni pies.

Está sola, en medio de la escena, luchando por sobrevivir, luchando por no perder su color, y volverse también gris.